viernes, 23 de julio de 2010

Bangkok

Para ir de Koh Tao a Bangkok cogimos un ferry rápido y luego un autobús, en total unas 8 horas entre pitos y flautas. Por el alojamiento no nos teníamos que preocupar porque Olivier y Nati, una pareja que conocimos en Indonesia, nos ofrecieron su habitación de invitados y nosotros aceptamos gustosos. (Nos convencieron con dos simples argumentos, es gratis y tiene piscina).
Llegamos un poco tarde y cogimos un taxi para ir hasta su condominio, que palabra más rara por cierto (para el que no lo sepa un condominio es como una especie de urbanización pero a lo alto). Nati estaba ya durmiendo y Olivier estaba en Laos porque tenía problemas con su visa de trabajo y tuvo que salir del país, por cierto él es Suizo y Nati es Tailandés.
A la mañana siguiente Nati tenía que ir a ver a su familia así que nos dejaron la casa para nosotros solos durante dos días enteros. Cuando nos levantamos nos tenía preparado un desayuno cojonudo, luego nos explicó un par de cosas de la casa y por último nos enseñó la piscinaca olímpica del condominio.
En nuestro primer día de turistas por la ciudad quisimos ver El Palacio Real y el Buda reclinado, que estaban por la misma zona. Para llegar tuvimos que coger el Skytrain (como un metro pero por o alto) y el ferry. En el Palacio Real lo más interesante es el Templo del Buda Esmeralda, mirad las fotos porque es difícil de explicar lo majestuoso que es. Pero lo que más nos marcó ese día fue el Wat Po o lo que viene siendo el Buda reclinado. Ahí sí que se nos cayeron los huevos al suelo, el Buda mide unos 40 y pico metros de largo y unos 5 ó 6 de alto, es dorado y cuando entras en el palacio dónde lo tienen metido lo primero que ves es la cabeza y yo no se porqué pero te la quedas mirando como si fueras tonto, aunque algunos lo somos (ya me hago yo la gracia porque sino los comentarios irán todos en ese sentido). Bueno pues eso que es im prezionante como diría aquel. Visita obligada a todo el mundo que pasa por Bangkok.
Ese día creo que no hicimos gran cosa más aparte de pegarnos un chapuzón en la piscina y darnos una vuelta por el barrio dónde nos alojábamos.
El siguiente día lo dedicamos a visitar centros comerciales en busca de gangas, y la verdad es que con la caída del euro la cosa no es tan gangosa como la pintan, o por lo menos nosotros no tuvimos esa sensación, yo por ejemplo miré precios de portátiles para cambiarme el mío por uno de esos chiquitajos y el precio que encontré era similar al de España y encima con un año menos de garantía, así que nada de nada.
Esa noche jugaba España y Hector venía de Koh Tao, así que quedamos con él en una zona de bares y vimos el partido en una terraza con un montón de Tais que iban con España, cuando metió Villa a poco del final nos abrazamos todos.
Al día siguiente más templos y el barrio chino y por la noche Olivier y Nati nos tenían preparada una cena estilo Tailandes cojonuda, la velada fue sensacional y nos sirvió para conocernos un poco más. Además vinieron Hector y un conocido de Olivier y Nati que estaba de paso por Bangkok.
Al día siguiente fuimos a ver el mercado flotante de Damnuek Saduak, en vez de contratar un tour organizado lo quisimos hacer por nuestra cuenta. Quedamos en una estación de autobuses dónde nos habían dicho que salían minibuses cada media hora, resulta que de eso nada, que el de las 8 lo habíamos perdido y que hasta las 10 no salía ninguno más. Resignación, un poco de sentido del humor y esperar al siguiente. Al rato nos vino a recoger el Carlos Sainz de los minibuses, menuda caña le metió el colega. Cuando llegamos contratamos una barca para que nos hiciera la visita por el mercado y resultó ser una mierda como una casa, una chicharra que metía el sol que no podías parar quieto por ningún lado, yo no sé si es que el mercado es guay a primera hora o qué porque lo que nosotros vimos era una atracción de feria para turistas despistados. Y para volver una odisea de más de cuatro horas en autobuses locales , vamos todo el día perdido por la porquería del mercado.
Esa noche había cena en casa con invitados de varios países y nos lo pasamos genial con dos chicos de Brunei que trabajan en una aerolínea y vuelan cada poco a Bangkok para emborracharse y pasárselo bien porque en su país no es legal ni emborracharse, ni ser gay, ni pasárselo bien creo.
El sábado nos fuimos al mercadillo más grande del mundo según mis cansadas piernas, es como si al de glorias lo multiplicas por doscientos, creo haber leído en un folleto que había más de 15000 tiendas. Al final nos compramos unos trapitos que nos hacían falta y para casa a la piscina como no.
Creo que he confundido las noches que pasamos por ahí, pero es que de esto hace ya unos días así que perdonad mi despiste, pero no pienso borrar nada de lo aquí escrito.
Al día siguiente nos íbamos para Ayuthaya, pero ese ya será otro post.

2 comentarios:

  1. ¡Hola chicos!
    Os voy a comentar dos cosillas, porque con el comentario de Dani en el post me he quedado sin nada que comentar, jeje, tenías razón. Pero una cosa muy importante es que en una de las fotos que salíis en en templo, sale Dani posando y al fondo de ésta, sale un transeunte semi agazapado mirándole y cominéndoselo con los ojos, yo no quiero decir nada...
    La verdad es que sí que impresiona tío, es alucinante e imagino que en directo aún lo será más.
    Por último, ¿que es el lagartaco ese que se ha inflao a galletitas?, tiene la barriguica llena ¿no?
    Bueno, nos vamos leyendo-escribiendo post by post.
    Un fuerte abrazo.

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  2. Hola guapos!!

    Me acabo de hacer un intensivo de vuestro blog y he flipao. Menudo viaje y cuantas aventuras! Que envidia cabrones jejeje!!

    Os escribo un mail mejor y os cuento cositas

    Muchos besosssss

    jona

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